Perdí muchas cosas en el camino. Por mala suerte o falta de valor nunca pude recuperarlas. Perder partes de uno mismo te enseña lo que realmente vale la pena. Valorar lo imprescindible, más allá de cualquier prejuicio, te predispone a mirar la vida y las personas más allá de lo que son. Aunque nunca recuperes las perdidas y las ganancias no sean buenas, siempre se mira adelante y se espera encontrar a la vuelta de la esquina una mejor manera de enfrentar lo perdido.
Bárb, dice:
- me deprime
- porque si ella esta al horno, yo no tengo ni posibilidad de entrar en la fuente! u.u
5 comentarios:
Anónimo
dijo...
Jajajaja, una de tus invenciones mas geniales de tu vida...y fui partícipe! creo que estoy por llorar...
5 comentarios:
Jajajaja, una de tus invenciones mas geniales de tu vida...y fui partícipe! creo que estoy por llorar...
ahhh, lo que causa Juliana, de repente todo el mundo llorando por una de sus ocurrencias...
No llores fliori! Siempre se puede estar mejor..o peor!
PROMETIDO, a ambas dos les digo!.
me gusta generar intriga...
que tristeza existencial....
puedo sumarme a goa?? quiero!!
si queres un consuelo, pensa en el viernes, asi pasa mas rapido
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